Cuestion de mundos.

Iba a encender la consola, para echar una partida. Luego he pensado -Bueno, a este juego le estoy dedicando ya mucho tiempo, varias horas, y no se si quiero perderme en su mundo- asi que me he planteado si poner otro distinto, y es aqui donde surgen mis dudas.

¿En que mundo quiero perderme esta noche? A estas horas, las once y pico, en mi mundo no queda nada, algunos colegas jugando online con los que desgraciadamente no puedo compartir aventuras, mi gato, a los pies, medio sobado mientras mi pequeña familia ya duerme. Pero que hay del otro lado... a traves de la pantalla.

No me refiero a la tele, ya nada me atrae de ella, son los videojuegos a los que soy aficionado los que me proponen distintos mundos al alcance de mi mano, pero claro, ya no soy el chaval estudiante de hace un tiempo, trabajo, familia, poco tiempo libre, resumiendo. Pasarme horas deambulando por un videojuego, sea cual fuere, es un esfuerzo considerable para mi, no tengo mucho tiempo "real", con lo que mi personaje tampoco lo tiene.

No me gusta empezar una partida y dejar a mi muñeco colgado en medio de la nada, sin sus misiones cumplidas ni sus objetivos alcanzados. No me gusta meterme en la piel de un personaje al que no podre a compañar todo lo que necesita. No es jugar por jugar, me divierte seguir sus historias, y es ahi donde cada vez que juego se convierte en un debate interno sobre que hacer esa noche (siempre me queda alguna partidilla rapida a un juego menos profundo).

Los videojuegos hoy en dia, son muy densos, con terrenos gigantescos y mundos detallados, son lugares en los que apetece explorar y averiguar que hay mas alla, las historias, los personajes, ya no estas solo, te sientes parte de algo, me parece increible como han podido desarrollar esa sensacion de "pequeño mundo" por el que te mueves formando parte de el.

Asi que esta noche no se a quien encarnare, pero me apetece jugar, lo malo, que es tarde y mi personaje tendra que esperar a mañana cuando los ojos se me empiecen a cerrar (o cuando mi habilidad con las armas se vea mermada por mi inminente estado de somnolencia).

Empieza un nuevo dia al otro lado.